Truncan el intento de secuestro de los restos mortales de Enzo Ferrari

Siempre se ha dicho entre los que saben, que Ferrari es una marca especial. Su historia es apasionante, llena de polémica, de prepotencia y de éxito en competición, aunque esto último no es, ni de lejos, como piensa la gente. La imagen de que a los mandos de un Ferrari siempre se gana viene de la época de Michael Schumacher, de aquellos años en los que fueron totalmente imbatibles. Antes no fue así ni por asomo, con un Enzo Ferrari imponiendo su ‘dictadura’ y sus limitados conocimientos técnicos, así como su obsesión por fabricar siempre los motores más potentes, dejado temas como chasis y otros apartados técnicos un tanto de lado y en ocasiones, completamente a su suerte.

Pero Enzo no sólo imponía su ley dentro de su propia compañía sin escuchar a nada ni a nadie, también tenía la lengua un poco larga y saltaba unas perlas que se han hecho famosas, así como sus desplantes, aquellos que hicieron que Ferruccio fundara su propia compañía de automóviles o que Ford creara el genial GT40. Era un tipo de armas tomar, prepotente y polémico. Pero de ahí, a querer robar su cadáver, hay un mundo. Porque sí, parece ser que la policía italiana ha frustrado los planes de una banda criminal que pretendía robar el cuerpo del fundador de Ferrari.

Dicha banda de criminales, dedicada al tráfico de drogas y armas, tenía intención de secuestra el cuerpo de Enzo y esconderlo en algún lugar de los Apeninos para pedir un rescate a la familia. Según el comunicado emitido por la policía italiana, descubrieron esta trama en el momento que investigaban a dicha banda por otros delitos. Según continúa el comunicado, el plan era muy sencillo: robar el ataúd de enzo, fallecido en 1988 con 90 años, trasladarlo a un lugar secreto de los Montes Apeninos y desde allí, contactar con la familia para ‘solicitar’ un cuantioso rescate. Incluso uno de los miembros de la banda, ya había estado tanteando y visitando el lugar donde yacen los restos del Commendatore, en el cementerio de San Cataldo. Además, se sabe también que pretendían emplear dos automóviles y una furgoneta para pertrechar semejante barbaridad.

Son cosas que ocurren en una sociedad sin prejuicios y más preocupada por mirarse el ombligo y que al mismo tiempo, endiosa a personas sin ningún fundamento. Enzo Ferrari fue el fundador de la marca Ferrari y fue un fabricante de coches, nada más. Vale que fue un personaje importante en el sector y alguien muy influyente, pero hay personas que ni siquiera saben quien es. Pensar en secuestrar su cadáver para pedir un restcate, es totalmente absurdo, siniestro y completamente asqueroso, si se nos permite usar esa palabra.

Una clara muestra de la falta de humanidad de un mundo colapsado por el consumismo, por el qué pensarán y por la estupidez. Al final los conspiracionistas van a tener razón y nos dirigimos a un futuro apocalíptico lleno de personas con cerebro derretido.